Hoy estoy inventando algo que todav�a no s� lo que es: Escritos p�stumos (Marginalia) - Softcover

Hern�ndez, Felisberto

9788417035129: Hoy estoy inventando algo que todav�a no s� lo que es: Escritos p�stumos (Marginalia)

Softcover

ISBN 10: 8417035125 ISBN 13: 9788417035129

Verlag: Sitara, 2017

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Este libro contiene los �ltimos textos de Felisberto Hern�ndez, los que escribi� a lo largo de su vida y no vieron la luz, la �ltima pieza que forma el todo de la obra del pianista uruguayo: sus �ltimos cuentos y fragmentos, imprescindibles para comprender el intrincado mundo del escritor que tan injustamente qued� en los m�rgenes del c�non.

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�ber die Autorin bzw. den Autor

Personaje singular e indispensable de la literatura fant�stica latinoamericana. Felisberto ha sido reconocido, admirado e influyente en nombres como el de Cort�zar, Borges, Onetti, Bola�o o Garc�a M�rquez. La figura de Felisberto es clave en el Boom Latinoamericano. Pianista que se vio obligado a vender su piano para poder sobrevivir; fluctuosa vida amorosa, con diversos matrimonios e intermitentes amantes; describe lo cotidiano del mundo, los objetos, la infancia desde ese prisma de lo fant�stico, influenciado por Proust o Kafka. Su vida transcurre entre m�sica, letras, contradicciones, extra�amiento, inocencia y pasi�n.

Auszug. � Genehmigter Nachdruck. Alle Rechte vorbehalten.

"En una tarde sin sol, fui a una plaza solitaria. De su piso blanco, de balastro, sal�an tan pronto en orden sim�trico como dispersos caprichosamente, eucaliptus inmensos que llegaban hasta el aire del cielo. All� arriba, el aire y las ramitas se mov�an un poco, y tal vez las hojas hicieran alg�n bisbiseo. Pero cuando los ojos llegaban hasta los troncos ―donde se recostaban echados para atr�s, los bancos― el silencio era quieto, la luz era quieta y el aire era quieto, y en el piso blanco quedaban separadas con bastante nitidez, las patas de los bancos y las ra�ces de los �rboles. Cerca del banco donde estaba yo, hab�an enterrado algunos aparatos de gimnasia. Una ni�a hac�a ejercicios para que yo la mirara. Yo me daba cuenta y segu�a mirando el piso blanco. Por el piso blanco pasaban apurados, pies de personas que cruzaban la plaza para ahorrar camino." Fragmento de ‘La plaza’.

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