La ciudad de la niebla (Castellano - JUVENIL - ANAQUEL) - Softcover

Baroja, P�o

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9788421618554: La ciudad de la niebla (Castellano - JUVENIL - ANAQUEL)

Softcover

ISBN 10: 8421618555 ISBN 13: 9788421618554

Verlag: Grupo Anaya Publicaciones Generales, 1993

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Madrid. 19 cm. 352 p. il. Encuadernaci�n en tapa blanda de editorial ilustrada. Colecci�n 'Anaquel', numero coleccion(30). Baroja, P�o 1872-1956. Edici�n, introducci�n, notas y actividades de Milagros Rodr�guez C�ceres. Bibliograf�a: p. 39-42. La ciudad de la niebla. Comentario de textos. Rodr�guez C�ceres, Milagros. 1954-. Anaquel (Editorial Bru�o). 30 .. Este libro es de segunda mano y tiene o puede tener marcas y se�ales de su anterior propietario. ISBN: 8421618555

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Rese�a del editor:

�La ciudad de la niebla� nos cuenta las andanzas del doctor Aracil y su hija en la capital inglesa. Han tenido que huir de Madrid, donde viv�an con toda clase de comodidades, por haber dado asilo en su casa a Nilo Brull, autor de un frustrado atentado contra los reyes en el d�a de su boda. La narraci�n corre a cargo de Mar�a que nos va hablando de sus intentos de aclimatarse...

Biograf�a del autor:

P�o Baroja y Nessi (San Sebasti�n, 28 de diciembre de 1872 - Madrid, 30 de octubre de 1956) escritor espa�ol de la llamada Generaci�n del 98. A los siete a�os march� con su familia a Madrid, donde el padre obtuvo una plaza en el Instituto Geogr�fico y Estad�stico. En 1891 termin� la carrera de medicina en Valencia y se doctor� en 1894 en Madrid con una tesis sobre �El dolor, estudio psicof�sico�. Ley� bastante filosof�a alemana (Inmanuel Kant y Arthur Schopenhauer), decant�ndose por el pesimismo de este �ltimo. T�mido y retra�do al mismo tiempo, nunca se cas�. Tras defender su tesis, march� en ese mismo a�o de 1894 a Cestona, en Guip�zcoa, con plaza de m�dico. Pero el oficio le asqueaba. Instalado en Madrid, empez� a colaborar en peri�dicos y revistas, simpatizando con las doctrinas sociales anarquistas, pero sin militar abiertamente en ninguna. Al igual que su coterr�neo Miguel de Unamuno, abomin� del nacionalismo vasco, contra el que escribi� su s�tira �Momentum catastrophicum�. En 1900 public� su primer libro, una recopilaci�n de cuentos titulada �Vidas sombr�as�, la mayor�a compuestos en Cestona sobre gentes de esa regi�n y sus propias experiencias como m�dico. En esta obra se encuentran en germen todas las obsesiones que reflej� en su novel�stica posterior. El libro fue muy le�do y comentado por prestigiosos escritores como Miguel de Unamuno, por Azor�n y por Benito P�rez Gald�s. Tuvo amistad con Maeztu. Con �l junto con Azor�n formaron durante un breve per�odo el grupo de los Tres. Viaj� despu�s por toda Europa y acumul� una impresionante biblioteca especializada en ocultismo, brujer�a e historia del siglo XIX, que instal� en un viejo caser�o que se compr� en Vera de Bidasoa y restaur� con gran gusto, convirti�ndolo en el famoso caser�o de Itzea, donde pasaba los veranos con su familia. En sus novelas reflej� una filosof�a impregnada con el profundo pesimismo de Arthur Schopenhauer, pero que predicaba en alguna forma una especie de redenci�n por la acci�n, en la l�nea de Friedrich Nietzsche: de ah� los personajes aventureros y vitalistas que inundan la mayor parte de sus novelas, pero tambi�n los m�s escasos ab�licos y desenga�ados, como el Andr�s Hurtado de �El �rbol de la ciencia� o el Fernando Ossorio de �Camino de perfecci�n (pasi�n m�stica�), dos de sus novelas m�s acabadas. Termin� por identificarse con las doctrinas liberales y por abominar del comunismo, sin abandonar en ning�n momento sus ideas anticlericales. En 1935 fue admitido en la Real Academia de la Lengua; En el periodo 1936-1939 regres� a Espa�a varias veces, y una de ellas fue a Salamanca para jurar como miembro del reci�n creado Instituto de Espa�a.Terminada la Guerra Civil, residi� entre Madrid y Vera de Bidasoa. Sigui� escribiendo y publicando novelas, sus �Memorias� y una edici�n de sus �Obras Completas�. Afectado poco a poco por la arterioesclerosis, muri� en 1956 y fue enterrado en el cementerio civil como ateo, con gran esc�ndalo de la Espa�a oficial. Su ata�d fue llevado en hombros entre otros por Ernest Hemingway y Camilo Jos� Cela, el uno era premio Nobel de literatura y el otro llegar�a a serlo a�os m�s tarde. Tambi�n el escritor norteamericano John Dos Passos declar� su admiraci�n y su deuda con el escritor.

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