Buchbeschreibung Zustand: New. Idioma/Language: Espa�ol. El t�tulo hace referencia a una respuesta que, al parecer, dio Chesterton cuando le pre-guntaron a qu� santos ten�a m�s devoci�n; �l aclar�: aquellos que todos los lunes se le-vantan temprano para coger el tren e ir al trabajo, vuelven a su casa todas las tardes tras haberse ganado el sustento de su familia y hacen lo mismo el resto de los d�as de la se-mana. �No lo olvidemos nunca. No son nuestros talentos, nuestros m�ritos los que est�n en el centro, sino el amor incondicional y gratuito de Dios. En el origen de nuestro ser cristia-nos no est�n las doctrinas y las obras, sino el asombro de descubrirnos amados, antes de cualquier respuesta que podamos dar. Mientras que el mundo quiere convencernos de que solo valemos si producimos resultados, el Evangelio nos recuerda la verdad de la vida: �l nos am� primero, �l nos esper�, nos ama y sigue am�ndonos. Esta es nuestra identidad: somos amados por Dios. Esta es nuestra fuerza: somos amados por Dios. �Esta verdad nos pide una conversi�n en relaci�n con la idea que a menudo tenemos sobre la santidad. A veces, insistiendo demasiado en nuestro esfuerzo por realizar obras buenas, hemos erigido un ideal de santidad basado excesivamente en nosotros mismos, en el hero�smo personal, en la capacidad de sacrificarse para conquistar un premio. De ese modo hemos hecho de la santidad una meta inalcanzable, la hemos separado de la vida de todos los d�as, en vez de buscarla y abrazarla en la cotidianidad, en el polvo del camino, en los afanes de la vida concreta y, como dec�a Teresa de �vila a sus hermanas, ?entre los pucheros de la cocina?� (Papa Francisco). Texto abreviado (publicidad) El t�tulo hace referencia a Chesterton: al parecer, cuando le preguntaron a qu� santos ten�a m�s devoci�n, aclar� que son aquellos que todos los lunes se levantan temprano para ir al trabajo, vuelven a su casa por la tarde tras haberse ganado el sustento de su familia y hacen lo mismo el resto de los d�as de la semana. �No lo olvidemos nunca. No son nuestros talentos y m�ritos los que est�n en el centro, sino el amor incondicional y gratuito de Dios. El mundo quiere convencernos de que solo valemos si producimos resultados, pero el Evangelio nos recuerda la verdad de la vida: somos amados por Dios. A veces, insistiendo demasiado en nuestro esfuerzo por realizar obras buenas, hemos erigido un ideal de santidad basado en nosotros mismos? Hemos hecho de la santidad una meta inalcanzable, la hemos separado de la vida de todos los d�as, en vez de buscarla y abrazarla en la cotidianidad� (Papa Francisco). *** Nota: Los env�os a Espa�a peninsular, Baleares y Canarias se realizan a trav�s de mensajer�a urgente. No aceptamos pedidos con destino a Ceuta y Melilla. Bestandsnummer des Verk�ufers 23634243

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Los santos del lunes

Ross�, G�rard

Verlag: CIUDAD NUEVA (2023)

ISBN 10: 8497155491 ISBN 13: 9788497155496

Neu Softcover Anzahl: 2

Anbieter:

Imosver
(PONTECALDELAS, Spanien)

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Buchbeschreibung Zustand: Nuevo. El t�tulo hace referencia a una respuesta que, al parecer, dio Chesterton cuando le pre-guntaron a qu� santos ten�a m�s devoci�n; �l aclar�: aquellos que todos los lunes se le-vantan temprano para coger el tren e ir al trabajo, vuelven a su casa todas las tardes tras haberse ganado el sustento de su familia y hacen lo mismo el resto de los d�as de la se-mana. �No lo olvidemos nunca. No son nuestros talentos, nuestros m�ritos los que est�n en el centro, sino el amor incondicional y gratuito de Dios. En el origen de nuestro ser cristia-nos no est�n las doctrinas y las obras, sino el asombro de descubrirnos amados, antes de cualquier respuesta que podamos dar. Mientras que el mundo quiere convencernos de que solo valemos si producimos resultados, el Evangelio nos recuerda la verdad de la vida: �l nos am� primero, �l nos esper�, nos ama y sigue am�ndonos. Esta es nuestra identidad: somos amados por Dios. Esta es nuestra fuerza: somos amados por Dios. �Esta verdad nos pide una conversi�n en relaci�n con la idea que a menudo tenemos sobre la santidad. A veces, insistiendo demasiado en nuestro esfuerzo por realizar obras buenas, hemos erigido un ideal de santidad basado excesivamente en nosotros mismos, en el hero�smo personal, en la capacidad de sacrificarse para conquistar un premio. De ese modo hemos hecho de la santidad una meta inalcanzable, la hemos separado de la vida de todos los d�as, en vez de buscarla y abrazarla en la cotidianidad, en el polvo del camino, en los afanes de la vida concreta y, como dec�a Teresa de �vila a sus hermanas, entre los pucheros de la cocina� (Papa Francisco). Texto abreviado (publicidad) El t�tulo hace referencia a Chesterton: al parecer, cuando le preguntaron a qu� santos ten�a m�s devoci�n, aclar� que son aquellos que todos los lunes se levantan temprano para ir al trabajo, vuelven a su casa por la tarde tras haberse ganado el sustento de su familia y hacen lo mismo el resto de los d�as de la semana. �No lo olvidemos nunca. No son nue. Bestandsnummer des Verk�ufers CIM0003954